La canela

La canela; la más antigua de las especias.

El árbol de la canela, conocido como canelo, y cuyo nombre técnico es Cinnamomum zeylanicum, es un árbol de hoja perenne de unos 10 metros de altura y originario de Sri Lanka y actualmente la más apreciada es la que proviene de Ceilán. Es la más antigua de las especias. Se utilizaba en China hace más de siete mil años y ya en el 2000 a.C. era objeto de intercambios comerciales por todo el Mediterráneo.



De este árbol, se aprovecha como especia su corteza interna que se obtiene pelando las ramas que se retiran cada dos años. Los fragmentos recogidos se raspan y secan al aire durante 24 horas; se enrollan sobre sí mismas formando cilindros huecos que se insertan unos dentro de otros. Estos rollos se destilan al vapor de agua para extraer la esencia y los más regulares se utilizan para la venta de canela en rama o en polvo.

 La canela se utiliza mucho como aromatizador de alimentos: el vino de especias, las carnes de caza, el curry e innumerables dulces que nos trasladan a nuestra infancia; ¿quién no recuerda el olor del arroz con leche de la abuela o los bizcochos caseros?

Pero también es muy apreciado en perfumería para crear fragancias especiadas y como modificador de perfumes orientales. Un aroma que forma parte de nuestra infancia y que acompaña a la humanidad desde hace más de 7000 años. Podemos encontrar notas de canela en el Eau de Parfum “close your eyes, and…” de Miller et Bertaux, en el Eau de Parfum SPICEAIR de HERMETICA y en “Siwa” de Memo Paris; por nombrar sólo alguno de los más emblemáticos.